Parece que Apple quiere desviar a Siri de su origen para optimizar su desarrollo. La compañía está contratando a un grupo de expertos en tecnologías de reconocimiento de voz en sus oficinas de Boston, con la intención de mejorar el asistente Siri. Curiosamente, esos expertos trabajaron para una compañía que absorbió Nuance (la creadora de Siri) en el año 2007.
La idea, según la fuente, es dejar de depender de los motores originales de Nuance e “independizar” a Siri para que Apple aplique su propia tecnología propietaria. De este modo actualizar el asistente sería mucho más fácil para los ingenieros de Cupertino, que no tendrían que estudiar un código que no han hecho ellos antes de ponerse a trabajar.
Siri ha ganado varias mejoras en la beta de iOS 7, y aunque no haya solucionado la vida de nadie Apple sigue dándole un fuerte apoyo como característica clave de sus terminales móviles. Además, con los planes confirmados de entrar en el coche por la puerta grande, Siri podría tener mucho más protagonismo en el futuro.
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