Uno de los campos que están investigando las operadoras es el offloading de las redes móviles (que, sobre todo en zonas urbanas, empiezan a estar muy saturadas) utilizando tecnologías como el Wi-Fi. Es la solución que se está comenzando a implantar en muchos núcleos de población.
La cuestión es que hay reguladores que no ven esta solución con buenos ojos, como el regulador israelí. Va a prohibir que los proveedores de servicios de telecomunicaciones utilicen la banda sin licencia del espectro para implantar redes Wi-Fi públicas.
¿Por qué? La principal razón es que, si los proveedores de servicio utilizan las frecuencias que no requieren licencia, limitarían el acceso público a Internet, utilizando frecuencias que deberían ser utilizadas por los consumidores u otras entidades. En Israel se reserva un ancho de banda menor para estos fines que en Europa o en los Estados Unidos.
No obstante entidades como administraciones públicas siguen teniendo permiso para desplegar este tipo de redes. De hecho Tel Aviv está desplegando una red Wi-Fi pública con el apoyo de Motorola Solutions.
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